Cities 2030 espera a Ceuta con los brazos abiertos
A Julio Lumbreras, el director del proyecto Cities 2023, le salen los números para dejar de quemar combustibles fósiles a lo loco. “Yo tengo un vehículo eléctrico y en tres o cuatro años lo has amortizado. A mí me cuestan los 100 kilómetros un euro. Si tienes un coche de gasolina o gasoil menos de 10-15 euros los 100 kilómetros no te cuesta. El ahorro económico es muy grande”. Y lo mismo con la movilidad de la ciudadanía en la ciudad, “Si te mueves más en modos no motorizados lo primero es que tu salud lo va a notar, es mucho más saludable y está demostrado que tu calidad y de vida y tu esperanza de vida aumenta”.
Parecen ideas sencillas, pero son nucleares para el cambio que trata de promover desde su plataforma, a la que Ceuta ha demostrado interés por sumarse tras el paso de Lumbreras por el Forbes Submmit Reinventing Ceuta.
Su plataforma de cooperación agrupa a 17 ciudades en España que colaboran para tratar de lograr el objetivo de reducir a cero las emisiones en sus urbes en ese 2030. Es muy difícil, pero no imposible, colaborando se divierten más y van más rápido ha aclarado Lumbreras. Y gestionan mejor porque algunas cosas las pueden comprar de forma unida y además reciben fondos europeos para la cuestión en sí.
Si Ceuta tiene motivación política para subirse a Cities 2030 “no es poco” ya subraya Lumbreras. Para ello advierte se requiere la voluntad del Gobierno y que le acompañe en esa voluntad la oposición y la ilusión y las ganas de dar pasos reales y efectivos para tratar de reducir las emisiones a cero. “Hay que trabajar en una hoja de ruta para descarbonizarse, qué tengo que hacer, cuánto me va a costar y cómo podemos atraer una inversión para hacer eso y eso es la unidad, hay que incorporar empresas, sector privado, ciudadanía, organizaciones, a la universidad, traerlos a todos para cambiar juntos la ciudad”.
Y se puede o no se puede lograr ciudades más amigables y saludables con menos emisiones y más energías renovables. Se puede. Lumbreras habla además de un verdadero efecto dominó. Si una cadena de supermercados anuncia en una ciudad inversiones para descarbonizarse, para hacer todo su consumo de renovables, la flota, el aire acondicionado, etcétera, en seguida su competencia hace lo mismo y apuesta por reducir a cero su consumo de combustibles fósiles.