La coalición de médicos y enfermeros surgida al hilo de las últimas elecciones sindicales celebradas en el seno del INGESA ha salido este 11 de junio a la palestra para anunciar que va presentar ante la Administración un escrito formal cuyo fin último pasa por instar al propio Instituto a abonar los recortes salariales que el colectivo sanitario lleva padeciendo "desde principios de año".

A juicio de CEMSATSE, los profesionales que se desempeñan en suelo caballa y que, por tanto, están adscritos al ente público llevan largo tiempo sufriendo en sus carnes "una pérdida de poder adquisitivo", una que "se ha acentuado con la congelación de sus retribuciones".

Hace ya algunos meses, el Gobierno que preside Pedro Sánchez se comprometió a aumentar en un 2% los solarios de los sanitarios de la pública antes de que el año 2024 llegase a su fin. Al citado porcentaje, se sumaría uno adicional de medio punto bajo el pretexto de "la subida de precios".

Dicen que 'las palabras se las lleva el viento'. Tras casi seis meses durante los que Moncloa ha aducido una y otra vez "motivos coyunturales de carácter político", el Ministerio de Sanidad no ha materializado aún subida alguna. Paralelamente, CEMSATSE ha seguido en sus trece utilizando como argumento "el encarecimiento del coste de la vida".

Según dicen desde la organización sindical, a la congelación de los salarios, hay que añadir "el recorte que los profesionales de la sanidad pública vienen sufriendo en sus pagas extraordinarias desde hace más de trece años". En esta línea, la entidad considera que "el grave problema de la realidad laboral de los sanitarios es la precariedad existente".