Ni una sola de las cifras del último informe del Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre pobreza en España dibuja un panorama halagüeño para Ceuta. La Ciudad Autónoma lidera todos los indicadores negativos y se sitúa como la localidad del país donde más posibilidades tiene una persona de acabar viviendo por debajo de los umbrales mínimos.

El estudio indica que la Tasa Arope -que mide el riesgo de acabar sufriendo pobreza o exclusión social- se situó el pasado año en un 41,8%. Un dato alarmante que no tiene parangón en ningún otro territorio de la nación. Andalucía, la siguiente en la lista aparece con un 37,5% y Melilla, su inmediata perseguidora en términos negativos registra un 36,7%.

En el marcador de riesgo de pobreza, Ceuta también es la peor. Un 35,9% de su población vive bajo esta amenaza. Las siguientes regiones con un mayor porcentaje de vecinos en esta tesitura son Melilla, con un 30,8% y Andalucía, comunidad en la que el 30,5% de sus habitantes enfrentan esta posibilidad.

Todavía más preocupantes es el hecho de que un 19,1% de los residentes en la ciudad autónoma vivan en condiciones de carencia material y social severa. Superando este porcentaje de manera muy amplia al siguiente peor dato, el de Andalucía, donde se sitúa en el 12,6%.

El otro aspecto que cuantifica el informe es la baja intensidad en el trabajo. Este es el único que Ceuta no lidera para mal, pues en la otra ciudad autónoma, la de Melilla con un 20,3%. Eso sí, se sitúa inmediatamente a continuación llegando al 17,3%.

La fotografía que arroja el estudio deja a las claras un importante problema de gestión por parte de la Administración a todos sus niveles y aconseja intervenir de manera rápida y eficaz antes de que las estadísticas de riesgo pasen a convertirse en realidad.