El PP quiere que el comentarista de TV3 que llamó "monos" a los aficionados del Ceuta desplazados este pasado domingo hasta el municipio de Tarragona pague las consecuencias de tan infantil temeridad. Ayer, el Gobierno local hizo pública su intención de denunciar al comunicador; hoy, 11 de junio, ha sido el propio Partido Popular el que ha puesto el grito en el cielo.

La formación que comanda Alberto Núñez Feijóo ha anunciado este mismo martes que interpelará al Ejecutivo central a propósito de lo sucedido al descanso del choque enfrentó a caballas y tarraconenses. Lo hará por mediación de Cristina Díaz, quien ha considerado oportuno trasladar a Sánchez y compañía una batería de preguntas directamente relacionadas con "los insultos racistas y las agresiones contra la libertad de culto".

En primera instancia, nuestra parlamentaria nacional quiere saber cuáles son las medidas que tiene previsto adoptar Moncloa a tenor de lo ocurrido en Murcia, donde los nuestros fueron recibidos hace ahora mes y medio en el contexto de lo que quienes estuvieron de cuerpo presente dibujaron como "un clima de hostilidad".

Lo que también quieren saber los populares es si el Ministerio del Interior tiene previsto proporcionar "recursos" a aquellos ceutíes a los que no les quedó otra que padecer los improperios. Díaz busca, con ello, "asegurar su protección y el respeto de sus derechos".

Volviendo a Cataluña, desde el PP, creen que la comparación entre la hinchada caballa y "los monos de Gibraltar" podría ser constitutiva de "un delito de odio", de ahí la intención de Feijóo y compañía de instar a Grande-Marlaska a llevar a cabo "acciones concretas" y a "iniciar una investigación".

Imperativos aparte, los populares preguntarán al titular de Interior por posibles "mecanismos de denuncia", por sus planes de colaboración en aras de la prevención de comportamientos discriminatorios y por los protocolos existentes para "sancionar discursos de odio en medios de comunicación".

Lo mejor, para el final: visto lo ocurrido con jugadores como Vinícius Júnior e Iñaki Williams, los de Feijóo consideran que, a lo mejor, las autoridades habrían de "reforzar la legislación actual" para, así, "prevenir y sancionar más eficazmente los delitos de odio en el contexto deportivo".